Me encanta que hayas llegado hasta aquí, significa que tú también eres una persona con inquietudes y abierta a hacer cambios en el día a día.
La verdad es que leerme el libro de Laura Opazo: Armario Sostenible, provocó un antes y un después en mi vida y, como consecuencia, en mi artesanía.
Soy andaluza, y en mi tierra hay pocas posibilidades fuera del sector servicios o del campo. Por eso para mí es importante, desde el principio, apoyar a las fábricas de aquí y que el impacto económico sea en la tierra que me vio nacer.
Así que las materias primas que uso son de km 0, es decir, andaluzas. En el caso de que no puedan ser andaluzas, pues de la península ibérica o como mucho europeas.
Con esto busco que las materias primas y por ende el producto final, tengan la menor huella de carbono posible.
Esta elección lleva adherida que estos materiales no incurran en delitos de mano de obra explotada o en situaciones de semi esclavitud y, además, que cumplan con las normativas sanitarias europeas. Con el añadido de que estas materias primas tienen el CERTIFICADO OEKO-TEX® STANDARD 100, que es una etiqueta para textiles que han sido sometidos a pruebas de detección de sustancias nocivas.
“El certificado OEKO-TEX® STANDARD 100 es la etiqueta ecológica más utilizada en el mundo para garantizar que los productos textiles etiquetados han sido analizados ante más de 300 sustancias nocivas. La certificación se basa en el catálogo de criterios OEKO-TEX® con fundamento científico y pruebas de laboratorio neutrales, teniendo en cuenta numerosas sustancias, tanto reguladas como no reguladas, que podrían ser perjudiciales para la salud, así como parámetros preventivos. En muchos casos, los valores límite establecidos para OEKO-TEX® STANDARD 100 superan los requisitos nacionales e internacionales.
Los tipos de productos que certifica el certificado OEKO-TEX® STANDARD 100 se agrupan en cuatro clases: Artículos que puedan estar en contacto directo con la piel para bebés y niños de hasta tres años (ropa interior, ropa de cama, toallas, pañales, productos de higiene, etc.), artículos en contacto directo con la piel (ropa interior, ropa de cama, camisetas, calcetines, etc.), artículos que no están en contacto directo con la piel (chaquetas, abrigos, etc.), y materiales de decoración (manteles, cortinas, fundas para muebles tapizados, etc.).”
Extracto de aitex.es
La materia prima (hilo o lana) menos contaminante es la que ya existe. Por eso, si tienes alguna prenda tejida a crochet guardada en el armario, háblalo conmigo y rescatemos ese material, demosle otra forma y una 2ª vida.
Si no quieres el material, pueden pasar tres cosas:
La palabra "artesano" viene del italiano "artigiano", que significa 'que ejerce un arte mecánico'. Este término viene del latín "ars", "artis" que viene de la raíz indoeuropea "ar", que significa 'mover, ajustar, hacer actuar'. Es solo a partir de finales del siglo XV, durante el Renacimiento italiano, cuando por primera vez se hace la distinción entre el artesano y el artista.
Una persona artesana realiza diferentes productos artesanales o artesanías. Las personas que hacen artesanías realizan su trabajo a mano o con distintos instrumentos propios del oficio, por lo que hay que tener cierta destreza y habilidad para realizar su trabajo.
Para diferenciar a las personas que se dedican a la artesanía de manera profesional de las que la ejercen cómo hobbie, existe un registro oficial de artesanos.
Cuando pasas el proceso de registro en el repertorio de artesanos reconocidos por la Junta de Andalucía, en mi caso, pasas a ser inscrito en este registro oficial y te conceden el reconocimiento de la Carta de Artesana y la placa de artesanía hecha en Andalucía.
Pincha aquí si quieres ver todas mis certificaciones